Mamarazzi 101: Tipos de cámaras para tu fotografía de familia.

Para hacer fotografía de familia, como ya comenté en mi anterior post del Curso de Mamarazzi 101, no me gusta darle prioridad al asunto de las cámaras. Personalmente no me preocupa cuál es mejor o peor, o cuánto quieres invertir en tu próxima cámara o móvil si lo que quieres es hacer es una bonita fotografía de familia.

Como muestra, os paso fotos hechas en dos sesiones de foto de familia. Una hecha con mi réflex, y otra con una compacta ¿sabríais apreciar la diferencia entre una u otra?

Obviamente, si tu hijo se dedica a hacer saltos con pértiga y lo que quieres es pillarlo volando por los aires mientras bate algún récord  ya nos tendríamos que poner más serios, pero dejemos los casos extremos para cuando haga “el curso de fotografía de niños que saltan con pértiga (edición deluxe…)”. Aunque prefiero quedarme aparte de este debate, entiendo que si estás en un pequeño dilema interno y busques algo de luz no está mal que te eche una mano (para eso estás leyendo esto, ¿no?). Así que allá voy. Disculpadme si lo que vaya a decir en algún momento suena demasiado técnico, aunque espero mantener todo el lenguaje ideado por ingenieros lo más al margen posible. Y de todas maneras, si hay algo que no te queda claro, te invito a que me dejes tu pregunta más abajo en los comentarios, que felizmente te contestaré a tus dudas.  

Empecemos.


Lo primero que quiero decir, y espero que con ello no escandalice a nadie, es lo siguiente… el tamaño de la imagen no importa… es decir, el número de megapíxeles. Como profesional, trabajo con una cámara que tiene menos megapíxeles que alguno de los móviles más recientes…, y mi fotografía no se siente afectada por ello, y no, tampoco mi cámara parece haberse acomplejado. Aunque la cosa sea un poco más complicada, quédate con que el número de píxeles sirve para definir tamaño de la foto, no más calidad, y por supuesto, no mejores fotos. A menos que tu intención sea empapelar un edificio de la Castellana con una fotografía de familia, te ruego por favor que no te centres en los megapíxeles, no te obsesiones por ello. Para los que no os acordéis, en un principio las primeras cámaras digitales comercializadas comenzaron con la proeza de tener 1 ó 2 megapíxeles (madre mía, cuánta fe había que tener entonces para abrazar la tecnología digital…) y lógicamente, entre marcas había una competición para ver quién sacaba una cámara con mayor número de píxeles, el hito tecnológico estaba claro. Aquel reclamo tecnológico que entonces tenía mucho sentido se ha quedado ahora algo desfasado, puesto que cualquier cámara actual es más suficiente para imprimir una fotografía a cualquiera de los tamaños que necesites (y si es para verla en la pantalla de un móvil, ya ni hablemos). Por el contrario, piensa que a cuanto más megapíxeles, más grande es el archivo de la foto, y más espacio de almacenaje vas a necesitar, y eso sí que es un buen quebradero de cabeza, así que mi consejo es que no te vayas a por la que tiene más simplemente por ese detalle. 


Una vez aclarado este asunto (uff…, me he quedado muy a gusto), vamos a hablar, al fin, sí, de cámaras. Muy brevemente, espero, voy a tratar de definir los tres tipos de cámaras que puedes encontrar, sus ventajas y sus inconvenientes, siempre teniendo en cuenta que la vas a utilizar para hacer tu fotografía familiar. Empecemos por la más común, la más práctica, y la reina del mercado. ¿Apuestas cuál es? La de tu móvil, por supuesto…

Cámaras de móviles

No hay más que ver cualquier estadística para comprobar que no hay cámara que se utilice más, ni esté más extendida, ni sea más popular que la que tu móvil. Qué mejor que la cámara que llevas constantemente encima, que te guarda las imágenes en la galería de tu móvil, que la puedes compartir o subir a las redes inmediatamente. Si lo pensáis, la batalla de la competencia entre las marcas de móviles se está lidiando ahora sobretodo en términos de las cámaras que incorporan, cada vez más megapíxeles (ay, qué pereza…), el software que incorporan o incluso el número de cámaras que traen (algunas vienen ya con 4 cámaras detrás y dos delante, y no por ello son mejores… ). 


Ventajas de las cámaras móviles
: Como no, es la reina de las cámaras por la accesibilidad y comodidad. Imagina que estás con tu retoño y de repente empieza a dar sus primeros pasos… indudable que lo primero que vas a hacer es agarrar tu móvil para hacer esas fotografía y video. Para ti para guardar ese recuerdo, y para enviarla inmediatamente a los abuelos. Esa inmediatez no hay otra cámara que lo supere, y simplemente la posibilidad de capturar momentos únicos la hace increíblemente valiosa. Por otro lado, los móviles van incluyendo cada vez lentes mejores, procesadores que están diseñados para sacar lo mejor de la foto y aplicaciones que te puedes descargar para hacer una edición de la foto en treinta segundos que la mejora de una manera espectacular. La mayor ventaja para mí es que todo el mundo disponemos de una, y con eso te puedes permitir aprender, jugar, practicar, etc… el poder de ser Mamarazzi en tus manos, ahí lo tienes. 

Inconvenientes: uno de los mayores inconvenientes es que como cámara, ésta se encuentra en un aparato que no está hecho exclusivamente para fotografiar. El móvil tiene un espacio reducido, y está diseñado para llevar a cabo multitud de funciones aparte de fotografiar (como llamar por teléfono…. ¿Quién se acuerda de ello?). Por el momento, hay leyes de la física que no se pueden superar, y una lente tan pequeña es difícil que alcance las prestaciones de las que incorpora una cámara de fotos. De ahí que las marcas estén optando por meter varias cámaras en el mismo móvil, cada una con una función específica, porque una sola tan pequeña no puede con todo. Otro inconveniente es el sensor de la cámara es pequeño por lo que no es tan bueno capturando fotos con baja luminosidad. Muchas veces las condiciones de luz en casa, un lugar donde vamos a hacer un montón de fotografías, no son las mejores, y los móviles no tienen tanto poder como para captar imágenes tan nítidas a baja luz como una cámara digital de otro tipo. Además, si lo que quieres es aprender a manejar parámetros de fotografía, el móvil no te deja muchas opciones. Tendrás que confiar más que nunca en sus automatismos. Por último, y como ya os recordaba cuando os daba mi primer consejo sobre fotografía con móvil, las lentes del móvil tienen a ensuciarse mucho, y tienes que estar pendiente de limpiarla antes de hacer la foto.


Cámaras réflex.

La cámara que desde hace muchísimos años ha ocupado el trono de las cámaras profesionales, las consideradas por todos como las auténticas, las serias… la que te comprabas cuando querías aprender a hacer fotos “de verdad”. Su potencial está fuera de toda dudas, y su avance técnico está en un punto en el que de hecho, los fabricantes tienen problemas serios para encontrar maneras de mejorarlas… y sin embargo, ¿crees que es la cámara que necesitas? Veamos qué ventajas e inconvenientes que tienen. 

Mi cámara réflex, fotografiada con mi cámara compacta.

Mi cámara réflex, fotografiada con mi cámara compacta.

Ventajas de cámaras réflex. A día de hoy, no hay otro tipo de cámara que tenga más equipo y desarrollo técnico a su servicio. La cantidad y calidad de lentes que puedes comprar no tiene rival. Si lo tuyo es la fotografía en palabras mayores, puedes confiar en que éstas son tus cámaras, sin duda. Además, en cuestión de factores determinantes como la velocidad y precisión en el enfoque, así la posibilidad de hacer fotos en condiciones de poquísima luz ambiental la han convertido en la cámara estrella. 

Inconvenientes. Esta vieja rockera de la fotografía, que como tal no morirá, ha entrado inevitablemente en una decadencia de la cual difícilmente se recuperará. Su nicho de mercado se está cerrando cada vez más, y las razones de ello son más que variadas. Principalmente porque no tiene mucho sentido adquirir una máquina de estas características si no es tu intención exprimirle todo el jugo. Si no tienes interés en gastarte un dineral adquiriendo nuevas lentes, o reservar mucho tiempo para aprender los tecnicismos del lenguaje de la fotografía, no conseguirás nada distinto de lo que alguna cámara compacta no te pueda dar. Y sí, las compactas te cuestan menos dinero, y son más fáciles de llevar encima. Si tu intención es aprovechar que te has comprado una de estas cámaras para aprender fotografía, adelante, ve a por ello, pero piensa que como un instrumento de música, cualquier cosa que aprendas requiere tiempo, esfuerzo, y constancia. Por no hablar del volumen y el peso de estas cámaras. Muchos profesionales de hecho están abandonando este formato porque hay cámaras más pequeñas que cumplen perfectamente esta función. Las últimas en aparecer, la última revolución en cámaras, las que voy a hablar ahora. 

Cámaras compactas y EVIL.

Tanto las compactas que han estado alrededor por mucho tiempo, de las cuales, las hay mejores y peores (cada vez son mejores), pero de precios imbatibles comparadas con cámaras réflex, y las llamadas a ser las predominantes de aquí a unos años, las EVIL (del inglés Electronic Viewfinder Interchangeable Lenses), que son las sustitutas a las réflex. Son cámaras que como en las réflex puedes intercambiar lentes de distintos tipo, pero su visor (el lugar donde poner el ojo para hacer la foto) no es óptico, sino electrónico (una pequeña pantalla, vaya). No voy a entrar en explicaciones de mecánica de cámaras para explicar las razones que le permiten reducir tanto el tamaño, hay mucha literatura ahí fuera que os lo podría explicar. Todas las marcas de fotografía se han vuelto como locas a diseñar cámaras de este tipo, porque muchos fotógrafos se han dado cuenta de que no tiene sentido llevar maletones enteros y kilos de peso encima cuando estas cámaras están alcanzando prestaciones fotográficas similares, con lentes más pequeñas y más ligeras. Entonces, ¿te estoy recomendando que vayas a por una de estas cámaras? Veamos las ventajas y los inconvenientes: 

Mi cámara compacta, fotografiada con mi cámara réflex (¿a que es bonita?)

Mi cámara compacta, fotografiada con mi cámara réflex (¿a que es bonita?)

Ventajas de las cámaras compactas y EVIL. Como digo, su volumen y peso hacen que las puedas llevar contigo prácticamente a cualquier lado. Como la cámara de un móvil, solamente que tienen prestaciones que como decíamos antes, un móvil le cuesta alcanzar, como un zoom de mayor calidad, control de parámetros a los que le puedes coger el gusto con el tiempo, y con las nuevas EVIL, posibilidad de adquirir nuevas lentes si le coges el gusto a esto de hacer de Mamarazzi. 

Inconvenientes. Comparadas con las cámaras réflex, a una compacta y una EVIL que no sea de las de muy alta gama (y estamos hablando de varios miles de euros) siguen siendo menos precisas en temas como la velocidad de enfoque (estamos hablando de fotografía de niños…, que otra cosa no, pero moverse….). Además, al ser completamente electrónicas, la vida media de una batería es menor que la de una réflex, a veces bastante menos, lo cual te hace tener que estar pendiente de ellas todo el rato por si se te agotan. El futuro de las cámaras pasa inevitablemente por aquí, pero aún queda unos añitos para que se puedan comparar en prestaciones a las cámaras réflex y tengan un precio asequible. 


Estas son las distintas posibilidades. ¿Con cuál te quedarías? La conclusión es que cada tipo tiene su historia, y tendrás que pensar sobretodo en cuál es tu estilo de vida, cómo es tu familia, y qué quieres conseguir con tu fotografía familiar, además de lo que quieras invertir en ello. Es probable que necesites menos de lo que crees para conseguir tus mejores fotos.  Cuestiones como el tiempo que tengas y el que le quieras dedicar a aprender conceptos y técnicas de fotografía, pueden ser vitales a la hora de decidir. Pero sobretodo, no te sientas culpable por querer hacer las fotos con tu móvil, o con la compacta, que tienes por casa, porque lo realmente importante está en cómo lo hagas, y cómo sepas sacarle partido a lo que tienes. En fotografía, muchas veces nos tenemos que adaptar a lo que tenemos y sabiéndolo, sacar lo mejor de ello. 

Y eso es todo lo que tenía que decir sobre cámaras. Siento haberme extendido sobre este tema, pero era parte imprescindible de la que tenía que hablar. Y posiblemente te haya dejado con más dudas aún. Insisto, pregúntame cosas concretas y trataré de respondértelas de la mejor manera. Esta parte tan técnica era importante pasarla y ya está (uff…, ya está). A partir de ahora, nos centraremos en la parte divertida que es hacer fotografías. Si te interesa, te invito a que te suscribas a mi lista de correo. ¡Serás el primero en saber las novedades!



¡Espero que sigas ahí para la siguiente clase! 

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